Hoy es el cumpleaños de Azabache y Perla está preparando una fiesta sorpresa. Cuando el Flaco y el señor Pulgas averiguan que no están invitados deciden montar su propia fiesta, pero un terrible lío con los pasteles amenaza con estropear la diversión. ¿Podrá la tía Brunilda solucionar el embrollo?

Después de una ajetreada mañana vigilando que todo esté perfecto en el Parque de la Alegría, Perla llega a su casa y... ¿qué es eso? Su preciosa fuente está rodeada de andamios y alguien ha pintado su adorado caparazón rosa ¡ de un triste color gris! Perla no tiene más remedio que marcharse.

Lejos, muy lejos de este mundo en que vivimos, existe una isla mágica habitada por indios y piratas, y por hadas traviesas que despiden un resplandor de oro y por bellas sirenas que cantan a la luz de la luna.

Una aventura ecológica en la que Pupi tendrá que enfrentarse al mago Pinchón por la superviviencia de un bosque y sus mágicos habitantes. El hada Merengada ha vuelto. Necesita la ayuda de Pupi. Varias de sus hadas han desaparecido sin dejar rastro. Sin las hadas, todo está a punto de desaparecer: la magia, los colores, los níveos y los silvestrinos y todos los seres que habitan los bosques. ¿Quién puede estar detrás de lo que está ocurriendo? Pupi lo tiene claro: esta parece otra fechoría del mago Pinchón.

El padre de Rosanda, en una de sus misiones como médico, desapareció hace ya mucho tiempo en un accidente de coche en Bolivia. Muchos piensan que murió, incluso la mamá de Rosanda, pero ella no. Así que madre e hija comienzan una gran aventura, con muchos sustos a veces, como cuando casi se las merienda un cocodrilo, y muchas risas y alegrías también.