Cuando llega la hora de acostarse, las luces se apagan y Julián es incapaz de quedarse dormido: tiene miedo. Miedo a los ruidos extraños, a las luces que entran por la ventana, a la oscuridad de su cuarto. Pero Julián sabe cuál es el mejor remedio para perder el miedo.

Ni el papá, ni la mamá, ni los dos juntos tienen suficiente fuerza para levantar de la cama a la bisabuela, que además no quiere comer. Pero la traviesa nieta sí... ¿A que no sabes cómo?

Una simpática viejecita se moría de ganas de viajar. Pero como no tenía dinero, decidió fabricarse un globo enorme. Así que, cose que te cose, teje que teje... después de unos días, ya estaba preparado el globo en la pradera.

Cuentos de toda la vida, protagonizados por niños y niñas que comienzan el camino hacia la autonomía personal con algún que otro susto. Construyen castillos en el aire, se fían de desconocidos, meten la nariz donde no deben y se creen capaces de todo. Historias que todos conocemos y que nos llegan de la mano de los niños más populares de la literatura.

La bruja Belinda se prepara para salir de paseo, ¿cómo viajará una bruja?